Tal vez podemos recordar varios años atrás, en algún viaje, de índole familiar o viaje de trabajo, encontrarse con Volkswagen Escarabajos, microbuses, Safari, Variant y otros con motor trasero, orillados en la carretera, con la tapa del motor abierta y humo saliendo por las rejillas de ventilación. En el peor de los casos, ver alguno de estos vehículos con el compartimiento del motor encendido en llamaradas de fuego y al conductor y ocupantes en la angustiosa tarea de intentar mitigar el peligroso fuego en el motor.
Lo anterior es un escenario que aunque parezca sacado de alguna pelicula, fue común observar en muchas carreteras alrededor del mundo en los años sesentas y setentas. Ya para la época de los ochentas, estos vehículos ganaron una mala fama en ese sentido. Siendo estos modelos los únicos representantes de la marca Volkswagen, muchas personas los catalogaron como vehículos incendiarios.Los improperios en contra de la marca eran bastante comúnes creando una mala imágen en el inconciente colectivo de aquella época.
¿Pero realmente cuál era la causa de este problema?, ¿porque se incendiaban?, ¿porque se recalentaban de manera que no podían continuar como cualquier otro vehículo en carretera? Para poder entender lo sucedido, debemos tener en claro el funcionamiento y bajo cuales principios operaban aquellos motores Volkswagen enfriados por aire.
Los motores Volkswagen enfriados por aire son motores a cuatro tiempos. El boxer es de cuatro cilindros opuestos, el sistema de refrigeración de dichos motores se basó en el principio del uso de un radiador de aceite. Cuando el motor está en funcionamiento, através de este radiador circula el aceite de motor, una turbina ubicada y dirigida hacia este radiador lanza aire con gran fuerza al radiador, con el consecuente resultado de enfriar el aceite que circula logrando mantener una temperatura ideal en todo el motor. Esta turbina es movilizada por una faja que tiene contacto con el cigueñal del motor con lo cual, al girar este último, también hace girar la turbina.
En la cara frontal del motor, se pueden encontrar algunos componentes como lo son el carburador el cual recibe del lado izquierdo unas mangueras provenientes del tanque de gasolina, la bobina de ignición y un poco más abajo, el distribuidor.
Para empezar, tenemos que decir que todas las circunstancias relatadas anteriormente se deben nada más y nada manos que descuido y negligencia de los propios dueños o usuarios de estos vehículos.
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En el caso de ver algún Volkswagen con la tapa del motor abierta y quizá expidiendo algo de humo, esto se da producto del recalentamiento del motor. Es importante agregar que estos vehículos contaban con un sistema de seguridad el cual se activa al sobrepasar una temperatura determinada, haciendo que el motor se apague por completo. Este recalentamiento se podía y puede dar por dos razones muy sencillas de prever. Una es la falta de cantidad y calidad de aceite en el motor. Esta situación fué muchas veces pasada por alto por usuarios quienes en muchos casos andaban el auto con un mínimo de aceite insuficiente produciendo el sobrecalientamiento del motor.
La segunda posible razón es igualmente por falta de mantenimiento preventivo. Como cualquier vehículo con motor de combustión interna, al cumplir una cantidad determinada de kilometraje recorrido, muchas partes sufren un gran desgaste desgaste. Un ejemplo de ellos son las denominadas fajas, las cuales en este caso transmiten el movimiento a la turbina que enfría el radiador de aceite. Con el desgaste, éstas pierden su textura y elasticidad quedando expuestas a sufrir una rotura, con lo cual la turbina deja de movilizarse y enfriar el radiador.
Por último tenemos la pesadilla de cualquier dueño de un Volkswagen enfriado por aire: el incendio del compartimiento del motor. Recordemos el paso de las mangueras y filtro dirigido hacia el carburador. Este acontecimiento se da por también por descuido y falta de mantenimiento preventivo por parte del dueño del vehículo. Al cumplir una determinada cantidad de kilometraje, estos componentes también pierden sus propiedades, dejando de desempeñar con efectividad su función. En el caso concreto de las mangueras, estas se resquebrajan y los filtros se agrietan, obstruyendo y desviando el paso del combustible. Estos al estar ubicados sobre el distribuidor eléctrico, envian pequeñas gotas de combustible a dicha unidad produciendo un terrible incendio.
Como lo hemos mencionado, todo esto se puede evitar, con un correspondiente y responsable mantenimiento preventivo. En el caso congreso de la manguera y filtro, éstas se pueden correr y ubicar lejos del distribuidor.
Contrario a lo que se cree , los modelos de Volkswagen (VW Type 1, Type 2, Type 3, Type 4, Safari, Ghia) poseedores de motores enfriados por aire, son vehículos con una calidad y construcción envidiables, pero requieren ser tratados y cuidados de una forma apta para mecanismos de combustión interna.
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